21/11/08, Callosa d´en Sarria
M.V.S
Tierra cubierta de paja, plaza y callejuelas adornadas y abarrotadas de puestos repletos de remedios para todo tipo de enfermedades, bollería, artesanía, embutidos y quesos caseros; artesanos trabajando a pie de la calle, juglares, malabaristas y músicos divirtiendo al público con su arte y caballeros luciendo sus preciosos jubones… Quien quiera que haya visitado el pueblo de Callosa el fin de semana pasado pensaría que el tiempo ha dado un giro inesperado para llevarle varios siglos atrás, a la Edad Media. Y no hacía falta poseer demasiada imaginación para ese curioso viaje, ya que el pueblo de Callosa realmente ha retrocedido muchos años en el tiempo gracias al Mercat Medieval, un acto ya tradicional en el pueblo que se ha hecho su hueco dentro de calendario de eventos Callosinos. El mercado, organizado por la concejalía de Comercio y Desarrollo Local, bajo la batuta de Oskar García, se iniciaba el sábado por la mañana con el discurso de inauguración del Alcalde de localidad, D. Batiste Saval que de forma poética invitaba a los visitantes disfrutar del mercado haciendo una mención especial a la historia de la villa de Callosa.
Este año destacaba por numerosas actuaciones, tales como duelos de caballeros, taller de tiro con arco, bailes orientales, diversos espectáculos cómicos, de serpientes, de fuego, malabares, actuaciones musicales y todo ello con una novedad: los divertimentos se han repartido por el casco antiguo, no concentrándose en la Plaza de España y permitiendo a los visitantes disfrutar de espectáculo donde quiera que estuvieran. Además, ha habido numerosos talleres de artesanos en vivo y puestos donde todo el mundo podía descansar tomándose algo rico acompañándolo de una cerveza o vino de la tierra. Un fin de semana estupendo que nos ha permitido disfrutar la vida enriqueciéndonos al pausado ritmo de aquellos siglos pasados. Y es que, como dijo un sabio, “saber vivir sin prisa es una manera de ser rico”.
M.V.S
Tierra cubierta de paja, plaza y callejuelas adornadas y abarrotadas de puestos repletos de remedios para todo tipo de enfermedades, bollería, artesanía, embutidos y quesos caseros; artesanos trabajando a pie de la calle, juglares, malabaristas y músicos divirtiendo al público con su arte y caballeros luciendo sus preciosos jubones… Quien quiera que haya visitado el pueblo de Callosa el fin de semana pasado pensaría que el tiempo ha dado un giro inesperado para llevarle varios siglos atrás, a la Edad Media. Y no hacía falta poseer demasiada imaginación para ese curioso viaje, ya que el pueblo de Callosa realmente ha retrocedido muchos años en el tiempo gracias al Mercat Medieval, un acto ya tradicional en el pueblo que se ha hecho su hueco dentro de calendario de eventos Callosinos. El mercado, organizado por la concejalía de Comercio y Desarrollo Local, bajo la batuta de Oskar García, se iniciaba el sábado por la mañana con el discurso de inauguración del Alcalde de localidad, D. Batiste Saval que de forma poética invitaba a los visitantes disfrutar del mercado haciendo una mención especial a la historia de la villa de Callosa.
Este año destacaba por numerosas actuaciones, tales como duelos de caballeros, taller de tiro con arco, bailes orientales, diversos espectáculos cómicos, de serpientes, de fuego, malabares, actuaciones musicales y todo ello con una novedad: los divertimentos se han repartido por el casco antiguo, no concentrándose en la Plaza de España y permitiendo a los visitantes disfrutar de espectáculo donde quiera que estuvieran. Además, ha habido numerosos talleres de artesanos en vivo y puestos donde todo el mundo podía descansar tomándose algo rico acompañándolo de una cerveza o vino de la tierra. Un fin de semana estupendo que nos ha permitido disfrutar la vida enriqueciéndonos al pausado ritmo de aquellos siglos pasados. Y es que, como dijo un sabio, “saber vivir sin prisa es una manera de ser rico”.
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