En los anuncios de televisión, se presentan los enjuagues bucales como líquidos milagrosos contra la caries, placa y el mal aliento. Es importante saber, en qué medida esto es así, cuándo hay que utilizarlos y cómo. Existen distintos tipos de enjuagues bucales, en líneas generales son los siguientes:
Enjuagues contra la caries: contienen en su fórmula porcentajes variables de Flúor; el Flúor por tanto, protege los dientes del ataque bacteriano, siempre y cuando se utilicen después del cepillado y el hilo dental.
Enjuagues especiales para las encías: suelen utilizarse cuando existe una inflamación de encías o gingivitis y se utilizan en períodos de tiempo pautados por el odontólogo. En general no deben utilizarse durante largos periodos de tiempo puesto que contienen un componente que mancha los dientes.
Enjuagues blanqueadores: los anuncios prometen que estos productos blanquean los dientes, sin embargo, no tienen ninguna base científica, por lo tanto los resultados pueden llevar a una decepción.
Enjuagues contra el mal aliento: funcionan durante varias horas, pero, pueden enmascarar infecciones de encías, caries o amigdalitis que es necesario tratar.
Se han llevado a cabo numerosos estudios sobre los efectos de los enjuagues bucales, y se ha llegado a diferentes y curiosas conclusiones; en general, son una buena estrategia de higiene oral, siempre y cuando se realicen tras el cepillado y el uso del hilo dental. Sin embargo tienen algunas contraindicaciones, por ejemplo, no se deben utilizar por un largo periodo de tiempo, puesto que pueden contener algunas sustancias químicas abrasivas que atacan las mucosas de la boca, provocando en algunos casos alteraciones en el sabor, o tinciones de lengua. También contienen componentes antibacterianos que si se utilizan a medio plazo pueden llegar a manchar los dientes. Todas estas contraindicaciones son secundarias a los componentes antibacterianos, con lo cual hay que saber utilizarlos en el momento adecuado y el tiempo requerido de uso.
Es aconsejable que si vamos a comprar un enjuague bucal por nuestra cuenta, como cualquier otro medicamento, pidamos información al farmacéutico sobre los beneficios y contradicciones de uso, y más importante aún, es conocer bien en qué caso es necesario utilizarlos y no dejarse llevar por los anuncios que ofrecen un “producto milagroso”.
Para más información:
Cristina Puigcerver Savall.
Clínica Dental
Avd. del Mediterráneo 1 - Puerta 4
Benidorm. Tlf 617 00 11 67
Enjuagues contra la caries: contienen en su fórmula porcentajes variables de Flúor; el Flúor por tanto, protege los dientes del ataque bacteriano, siempre y cuando se utilicen después del cepillado y el hilo dental.
Enjuagues especiales para las encías: suelen utilizarse cuando existe una inflamación de encías o gingivitis y se utilizan en períodos de tiempo pautados por el odontólogo. En general no deben utilizarse durante largos periodos de tiempo puesto que contienen un componente que mancha los dientes.
Enjuagues blanqueadores: los anuncios prometen que estos productos blanquean los dientes, sin embargo, no tienen ninguna base científica, por lo tanto los resultados pueden llevar a una decepción.
Enjuagues contra el mal aliento: funcionan durante varias horas, pero, pueden enmascarar infecciones de encías, caries o amigdalitis que es necesario tratar.
Se han llevado a cabo numerosos estudios sobre los efectos de los enjuagues bucales, y se ha llegado a diferentes y curiosas conclusiones; en general, son una buena estrategia de higiene oral, siempre y cuando se realicen tras el cepillado y el uso del hilo dental. Sin embargo tienen algunas contraindicaciones, por ejemplo, no se deben utilizar por un largo periodo de tiempo, puesto que pueden contener algunas sustancias químicas abrasivas que atacan las mucosas de la boca, provocando en algunos casos alteraciones en el sabor, o tinciones de lengua. También contienen componentes antibacterianos que si se utilizan a medio plazo pueden llegar a manchar los dientes. Todas estas contraindicaciones son secundarias a los componentes antibacterianos, con lo cual hay que saber utilizarlos en el momento adecuado y el tiempo requerido de uso.
Es aconsejable que si vamos a comprar un enjuague bucal por nuestra cuenta, como cualquier otro medicamento, pidamos información al farmacéutico sobre los beneficios y contradicciones de uso, y más importante aún, es conocer bien en qué caso es necesario utilizarlos y no dejarse llevar por los anuncios que ofrecen un “producto milagroso”.
Para más información:
Cristina Puigcerver Savall.
Clínica Dental
Avd. del Mediterráneo 1 - Puerta 4
Benidorm. Tlf 617 00 11 67
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